La Asociación para la Promoción Turística de La Ruta de la Garnacha, entidad que vela por la gestión del destino turístico de la Comarca Campo de Borja y del producto vinculado al turismo de vino, convocó a lo largo del mes de junio dos mesas de trabajo destinadas a la puesta en valor de un conjunto arquitectónico popular que, en buena parte, define el paisaje cultural del territorio: las bodegas en cerro.

El paisaje declarado de interés turístico abarca a 20 localidades unidas por el nexo común del paisaje vitivinícola de la garnacha, poseyendo singularidad propia y extraordinario valor cultural y medioambiental, ya que muestra elementos característicos y comunes, como las bodegas en cerro, el paisaje de viñedos, los yacimientos arqueológicos o los senderos que atraviesan el paisaje.
La Ruta del Vino de La Garnacha (Enoturismo de Aragón y Rutas del Vino de España invitó, a lo largo del mes de junio, al conjunto de actores políticos, económicos y sociales del territorio, a manifestar en dos mesas de trabajo convocadas a tal fin, sus impresiones e inquietudes sobre un elemento tan singular de su patrimonio cultural como son las bodegas en cerro, conocidas también como cuevas vinarias.
La mesa del día 13 de junio, abierta a todo el territorio y dirigida por D. Vicente Chueca y miembro del Observatorio del Paisaje Campo de Borja, solicitaba la colaboración de los asistentes manifestando qué es lo que, actualmente, les preocupa de las bodegas en cerro, desde cuestiones de mejora de las mismas a medidas administrativas que puedan ir dirigidas a preservar un legado cultural único y propio de la memoria de esteterritorio. Todo ello dio lugar a un DAFO que posteriormente fue utilizado en una segunda mesa de trabajo.
A lo largo del verano, el Observatorio del Paisaje Campo de Borja y la Asociación para la Promoción Turística de la Ruta de la Garnacha se reunirán en varias ocasiones con el fin de establecer una estrategia de trabajo que permita desarrollar los objetivos planteados desde el DAFO y las aportaciones de las entidades locales que ya han participado y, por supuesto, de aquellas que quieran sumarse al proyecto de ahora en adelante. Serán 3 líneas estratégicas, y sobre las que deberá desarrollarse un programa de acciones con su correspondiente cronograma: sensibilización en el propio territorio; conservación y mantenimiento mediante procedimientos de la administración y la parte que corresponde a imagen y comunicación.