Y lo hace por todo lo alto: estrenando nueva carta en su local de siempre, aunque con un aspecto totalmente renovado y con propuesta gastronómica que gira en torno a las culturas del mundo con cinco platos del día inspirados en cada uno de los continentes . Además dispone de una amplia oferta de cervezas que pretende reunir los mejores aromas de Berlín, Praga, Ámsterdam, Tokio y Chicago.
El restaurante, que cuenta con una larga trayectoria y goza de gran popularidad entre los zaragozanos y también entre los turistas, celebra su primer cuarto de siglo en su mejor momento: en un innovador y moderno espacio con una carta mucho más versátil, que reúne a la vez los sabores más exóticos y tradicionales, apostando siempre por un importante arraigo aragonés con productos de calidad y de cercanía.
Su actual propuesta gastronómica es amplia y variada, siendo sus platos del día la estrella de la carta. Con ellos, viajaremos por los distintos continentes conociendo los sabores del mundo, desde un americano burrito de pollo y verduras gratinado al horno con guacamole y nachos, hasta un asiático ramen de calamares con huevo y bisqué de marisco pasando por un europeo solomillo de cerdo estrogonoff y también, por una africana receta de merluza con leche de coco, arroz negro y chips de yuca. Aunque eso sí, este exótico viaje no hace perder al restaurante su esencia aragonesa y sigue ofreciendo en su carta el tradicional menú de Ternasco de Aragón.
Además, El Real también contempla propuestas más informales en su carta siendo las tapas y la degustación de sus cinco cervezas de cabecera, dos de los puntos fuertes de este renovado espacio. Canelón de butifarra con salsa de boletus, langostinos en tempura de alga nori y mahonesa de wasabi, o croquetón de yuca y queso, son una pequeña muestra de las tapas que se podrán encontrar. Y la mejor compañera para estas tapas es, sin duda, la cerveza, donde su amplia oferta pretende reunir los mejores aromas de Berlín, Praga, Ámsterdam, Tokio y Chicago.
El Real, una auténtica joya de la ciudad
Este restaurante se ha convertido en uno de los emblemas de la ciudad. Ubicado en plena Plaza del Pilar, El Real está situado en un edificio modernista del siglo XIX. Tras 25 años de trayectoria es, sin duda, uno de los referentes gastronómicos en la capital aragonesa. Celebran este cuarto de siglo renovando totalmente su imagen: una cosmopolita arquitectura y una nueva carta mucho más versátil, que reúne los sabores más exóticos de diferentes rincones del mundo. Pero siempre apostando por el producto aragonés ofreciendo productos de calidad y de cercanía.