Un valle que despierta
La bodega SOMMOS Garnacha, ubicada en Murero (Zaragoza), ha sido el epicentro de la tercera edición de las Jornadas de Vinos de Paisajes del Jiloca, un evento que reunió a más de 40 profesionales del mundo del vino: viticultores, bodegueros, investigadores y divulgadores que comparten una misma misión: proteger y revalorizar el viñedo del valle del Jiloca, un territorio único, todavía poco conocido, pero con un potencial vitivinícola extraordinario.
Organizado por la Asociación para la Recuperación del Viñedo del Valle del Jiloca, el encuentro reafirma la apuesta de SOMMOS Garnacha por el territorio. Como señaló Diego Mur, director de marketing de la bodega, «regenerar y dar una segunda vida a vides olvidadas es una labor fundamental que garantiza la diversidad enológica en la zona».
Un foro de ciencia y pasión
La jornada fue también un espacio de aprendizaje e intercambio. Carlos Duque, director de viticultura de SOMMOS Garnacha, centró su intervención en la diversidad de suelos de la región, destacando cómo esa riqueza mineral imprime carácter a cada vino. Por su parte, Samuel Franco (CITA Aragón) profundizó en la gestión sostenible del suelo, subrayando su papel esencial frente al cambio climático. Ricardo López, investigador de la Universidad de Zaragoza, exploró el vino desde una perspectiva sensorial y científica, mientras que Michel Arenas, presidente de la D.O. Calatayud, ofreció una panorámica del mercado actual.
Vinos que cuentan historias
Pero el encuentro no se quedó solo en las palabras. Tras las ponencias, los asistentes recorrieron la bodega y participaron en una cata maridada de vinos elaborados con uvas del valle del Jiloca. Desde los Araia y Tiaso de SOMMOS Garnacha hasta el Viña Satoshi Orange de Pago de la Boticaria, pasando por propuestas de Bodegas Rubus, Daroca Bodega, San Alejandro, Castro Laborda, Breca, Raíces Ibéricas o Augusta Bílbilis, la degustación fue una muestra vibrante del paisaje embotellado.
Cada vino se acompañó con tapas creadas para la ocasión por el chef Ángel Ruiz, haciendo de esta cita un auténtico festín de territorio, sabor y cultura.
